martes, 3 de febrero de 2009

Los aplausos para acabar con las invasiones

Ricardo Esquivel Castañeda
Dirigente Antorchista en Sonora

Recientemente se dieron invasiones de gente sin vivienda a predios del ayuntamiento de Hermosillo, sumándose a varias que ya existían de años atrás; como siempre, se ha criticado en los medios los problemas de las invasiones.
Se ha dicho que se esta utilizando como carne de cañón en época electoral a gente humilde, que se asienta a la gente en lugares de alto riesgo y además, que los líderes se enriquecen con cuotas que le piden a la gente.
Pero hay otros que teorizan el problema y le echan porras o aplausos al presidente municipal actual de extracción empresarial para que no se amilane ante su embestida contra este problema social que son las invasiones y que solo generan un cuadro desagradable para la vista de nuestra clase local pudiente. Se dice que éstas son una industria de la manipulación, pero además, que es falso que se ayude a la gente pobre ya según ellos hay estudios que demuestran que la gente paga tres veces más de lo que cuesta; que se le paga al dueño del terreno, a las oficinas del gobierno y a los lideres por las cuotas.
Luego viene que a los “pobres” se les hace pedigüeños y dependientes de las autoridades al tener que andar solicitando luz, drenaje, pavimento y todo tipo de servicios. Y como llamado a la autoridad se dice que no se deben de permitir y que se implanten procedimientos mas ciudadanos y respetuosos de la dignidad humana para atender el problema de la vivienda de las familias de bajos ingresos. Por lo que se puede ver solo se abordan los efectos pero no las causas, claro, es más fácil aplaudir que señalar los males del sistema.
Decir la verdad es aceptar la realidad en que nos movemos y lo cierto es que, la gente invade no por gusto sino por necesidad, porque no encuentra un camino para hacerse de una vivienda. Me consta que la gente va al ayuntamiento y al gobierno del Estado a solicitar que le vendan un terreno con facilidades de pago donde siempre le responden que no hay terrenos, que si quieren pies de casas, que ahí están nada más que le entren con diez mil pesos.
¿Qué puede hacer una familia que no tiene ni para comer?, pues simplemente nada, sigue con su problema. La otra es que la gente pobre no quiere las casas para pichones por ser chicas, son un verdadero infierno, mal construidas y feas. Es una contradicción remediar el problema del “sin vivienda” metiéndolo en otro problema de estrechez, a sufrir el calaron, la incomodad que significa vivir en cocina, baño y comedor juntos, es en verdad una solución para volverse locos y ellos, los críticos, mientras piden respeto al Estado de Derecho viven en casas o residencias amplias, cómodas y lujosas.
Se ve que la política actual es meter a la fuerza a los jodidos en esos cuchitriles porque creen que así acabaran con el problema de la vivienda pero no lo lograran porque la escasez de la vivienda es un problema inmanente al sistema social y representa un jugoso negocio para los poderosos. También se critica la política de petición pero no se dice nada, absolutamente nada del gobierno que se niega a resolver los problemas de los más necesitados y donde los gobernantes sienten que el poder es para enriquecerse porque lo ven como si fuera su propiedad.
No quieren que los pobres pidan mejor vida por las calles y no invadan terrenos, resuélvanles sus problemas consagrados en la constitución y verán que cesaran las peticiones para vivir en mejores condiciones de vida.
La realidad nos indica claramente que mientras vivamos en el capitalismo la gente generadora de la riqueza social de este país, que es la mayoría, no puede confiarse a la indulgencia de los políticos porque la práctica nos dice que mientras para el poderoso hay todas las facilidades para que siga hinchándose más, otorgándoseles terrenos, exentándolos de pagos de impuestos etcétera, etcétera, a los pobres se les sataniza de pedigüeños e invasores de la sagrada propiedad. El llamado debería ser pues a este gobierno para que cumpla con su deber y no a los pobres, eso es lo más correcto.

0 comentarios:

EL SOL DE CABORCA 3 © 2008 Template by:
SkinCorner